Thursday, April 12, 2007

Los Pedantes no veranean, exploran

¿Han pensado ya qué harán este verano con su tiempo libre? Olvídense de la grey y sus playas y de los atracos azadón en mano del turismo rural, los países del segundo mundo (actualmente oscilando entre el tercero y el primero) ofrecen multitud de posibilidades para el turista extremo y carente de sentido común.
Cambien el bañador por el traje de comando y la loción bronceadora por una cámara de iones, lo más ya no es Ibiza, es Chernobyl.

Hace ya unos años que había encontrado algunas páginas de gente que, con un contador Geiger casero, una cámara de fotos y un compañero para vigilarle las espaldas, se dedicaban a documentar el estado actual de la zona que rodea al lugar del desastre; no he sido capaz de encontrar las mismas, aunque sí me he topado con las páginas de Elena Filatova, fanática de la arqueología postnuclear.

La inhumana y fascinante arquitectura soviética y la decoración para la nunca celebrada fiesta del Día del Trabajo acentúan el aspecto fantasmal de la zona, convirtiéndolo en un lugar mucho más atractivo para achuchar a la pareja y hacer manitas que, pongamos, Punta Cana.

De regalo: algunos proyectos de arquitectura soviética nunca realizados.